Estás aquí

Biografía de Diego de Almagro

21961 lecturas
14 minutos
Actualizado: 02-07-2023
¡Compartir!
14 minutos
Biografía de Diego de Almagro
Diego de Almagro

Biografía de Diego de Almagro

Resumen

Diego de Almagro fue un conquistador, adelantado, gobernador y descubridor de Chile. Nació en el año 1480 en la provincia de Ciudad Real (Castilla), se discute si en la localidad de Almagro o en la de Malagón. Su nombre real era Diego de Montenegro Gutiérrez, hijo ilegítimo de una relación extramatrimonial por lo que su madre, para no caer en deshonra, lo entregó a una institución en un pueblo cercano.

Su infancia fue bastante movida, su carácter rebelde y nervioso le hizo no querer estar bajo disciplina de nadie, ni siquiera de familiares suyos, instalándose en Sevilla donde en aquellos años llegaban jugosas noticias de los descubrimientos de los navegantes españoles más allá del Océano. Esto le llevó a enrolarse en la expedición de Pedrarias Dávila de 1514 que marcharía a Tierra Firme, recién colonizada con la fundación de Santa María la Antigua del Darién.

Una vez en el Darién formó parte de diversas expediciones junto a Vasco Núñez de Balboa y Francisco Pizarro obteniendo un solar en la recién fundada ciudad de Acla e indios que le fueron entregados para que trabajasen sus tierras. Con esto logró cierta riqueza que le permitió optar a mayores empresas. En Panamá tuvo un hijo con una india local bautizada como Ana Martínez al que llamó Diego que fue conocido posteriormente como Diego de Almagro, el Mozo.

Se asoció con Pizarro y el vicario del Darién, Hernando de Luque, en la empresa de exploración al sur de Panamá en búsqueda de unas tierras llamadas Pirú. Recientemente había regresado de esas tierras un par de expediciones capitaneadas por Gaspar de Morales y Pascual de Andagoya que llevaron noticias de grandes pueblos y riquezas.

De esta manera participó en las conquistas del Perú, en uno de sus viajes, el de 1525, Almagro perdió un ojo luchando contra los nativos por lo que se le empezó a conocer como “el tuerto”. Una vez derrotado el imperio incaico participó junto a Sebastián de Belalcázar en la conquista de Quito que abrió el camino a la conquista del reino de Nueva Granada. Allí en Quito se tuvo noticia de la llegada de una expedición militar de Pedro de Alvarado, gobernador de Guatemala, que llegaba con la intención de ocupar ese territorio. Pizarro envió a Almagro a encontrarse con él y a convencerle de que aquellos territorios ya no estaban libres y le hizo una oferta que aceptó comprándole parte de su ejército. Almagro había logrado evitar un enfrentamiento entre españoles.

Tras su aventura peruana el rey le nombró adelantado y gobernador del reino de Nueva Toledo, un territorio llamado Chile aún inexplorado y que quedaba al sur de la Nueva Castilla de Pizarro. Para ello en 1535 organizó y ejecutó una expedición durísima que le llevó a a marchar al sur por el Alto Perú, atravesar los Andes y llegar al valle del río Copiapó ya en Chile. Allí pudo observar que no había las riquezas del Perú y que tan solo la explotación agraria podía extraer algo de esas tierras. Sus hombres le presionaron para no quedarse allí y volver al Perú a tomar posesión de la ciudad de Cuzco, alegando que la capital incaica caía dentro de sus territorios de Nueva Toledo y no en la Nueva Castilla de Francisco Pizarro.

Regresaron al Cuzco y tomaron la ciudad en abril de 1537.  Pizarro reaccionó y envió un ejército al mando de su hermano Hernando. El enfrentamiento se produjo en la llamada batalla de las Salinas en la que Almagro fue derrotado, hecho prisionero y llevado a Cuzco donde fue ejecutado el 8 de julio de 1538.

Biografía Completa

Infancia

Diego de Almagro en verdad se llamaba Diego de Montenegro Gutiérrez por haber nacido de la unión de Juan de Montenegro y de Elvira Gutiérrez, pero como estos no estaban casados trataron de ocultar su nacimiento el honor de su madre entregándolo a una vecina localidad de Aldea del Rey. Pasados varios años regresó a Almagro donde estuvo bajo tutela de un tío suyo llamado Hernán Gutiérrez que lo acogió y educó hasta los 15 años bajo un duro régimen disciplinario, algo que no era fácilmente soportable por Diego. Por ello terminó fugándose y huyó, con dinero de la madre, a Sevilla donde fue criado por don Luis de Polanco, el alcalde de la ciudad. Pero Diego era bastante pendenciero y rebelde. En una reyerta hirió gravemente a un hombre siendo puesto en orden de búsqueda y captura. Polanco le facilitó una salida enrolándole en la expedición que estaba a punto de partir de Sevilla hacia las Indias, la de Pedrarias Dávila en 1514.

 

Panamá

Su primer destino en Las Indias fue la recientemente fundada ciudad de Santa María la Antigua del Darién en la llamada Tierra Firme, el primer territorio continental conquistado por los españoles. Hasta el momento todo lo conquistado fueron las islas antillanas y alguna exploración por costas del norte de Sudamérica.

Una vez establecido en el Darién conoció a importantes personajes que en breve protagonizarían grandes gestas, como por ejemplo Francisco Pizarro, futuro conquistador del Perú, y Vasco Núñez de Balboa, que ya había descubierto el Mar del Sur. Junto a ellos participó en la fundación de la ciudad de Acla y en diversas expediciones obteniendo con ello el premio de una encomienda, una parcela e indios para cultivarla por lo que se dedicó a la agricultura principalmente. Con estas actividades logró cierta riqueza que le permitió empezar a aventurarse en mayores empresas.

Aquí en Panamá tuvo un hijo con una india panameña llamada Ana Martínez al que llamó Diego que fue conocido posteriormente como Diego de Almagro, el Mozo.

 

Perú

Entre Almagro y Pizarro se generó una intensa amistad que les llevó a asociarse en importantes empresas. En 1524 ambos se asociaron con el vicario del Darién, Hernando de Luque, en la empresa de exploración al sur de Panamá en búsqueda de unas tierras llamadas Pirú. Las noticias de importantes civilizaciones y grandes riquezas las habían traído a Panamá dos expediciones previas capitaneadas por Gaspar de Morales y Pascual de Andagoya, que navegaron costeando el Pacífico y entablaron contacto con distintas pueblos nativos que les hablaron de ricos y poderosos imperios navegando más hacia el sur.

Se pusieron manos a la obra y entre los tres se repartieron las tareas: Pizarro sería el ejecutor de la expedición, Almagro el organizador que quedaría en Panamá gestionando apoyo logístico y Luque, aparte de poner dinero, se ocuparía de tener al gobernador Pedrarias de su parte para que no pusiese ninguna pega. El 13 de septiembre de 1524 la carabela Santiago partió de Panamá con Francisco Pizarro comandándola, junto a él iban 112 españoles, 4 caballos e indios porteadores. Almagro partiría unas semanas después en la carabela San Cristóbal como refuerzo de la primera.

La navegación fue extremadamente dura por motivos metereológicos que no colaboraron. Llegaron al archipiélago de las Perlas, dejaron atrás el golfo de San Miguel, el puerto de las Piñas y entraron en el rio Birú, que navegaron un poco, pero solo encontraron pantanos, bosques y rocas. El tiempo pasaba y las provisiones empezaron a escasear pero esto no arrendró a Pizarro que quería continuar a toda costa. Sus hombres protestaron y forzaron que uno de los buques volviese a Panamá a por bastimentos y refuerzos. Siguieron la navegación desde el puerto del Hambre hasta un paraje al que llamaron Pueblo Quemado en donde tuvieron el primer encontronazo con los nativos locales con el resultado de varios españoles muertos y Almagro sufrió una herida en uno de sus ojos, lo que le supuso que de ahí en adelante fuera conocido como “el tuerto”, en un tono despectivo. Tras todo esto decidieron regresar a Panamá a organizar una segunda expedición a pesar del pobre resultado obtenido de esta.

En octubre de 1526 iniciaron la segunda expedición esta vez los dos juntos en las mismas carabelas y con el famoso piloto Bartolomé Ruiz de Estrada que conocía muy bien las costas panameñas. Este segundo viaje fue mucho mejor que el primero: exploraron bien la costa y las islas y se encontraron con comerciantes nativos de una ciudad llamada Tumbes vestidos de algodón y landa y con adornos de oro y esmeraldas. Esto indicaba la existencia real de civilizaciones más avanzadas. Pero de nuevo surgió el problema de los abastecimientos, que volvían a escasear y llevó a ambos capitanes a un primer enfrentamiento: Pizarro quería continuar y Almagro regresar. Al final decidieron que el primero se quedase esperando en la isla del Gallo y el segundo volvería a Panamá a por refuerzos.

Almagro al llegar a Panamá se encontró con que Pedrarias ya no era el gobernador, ahora estaba Pedro de los Ríos, que sorpresivamente se negó a apoyar la expedición y a enviar más pertrechos, solo accedió a fletar dos buques para rescatar a Pizarro y sus hombres y regresarlos a Panamá. Cuando ambos buques llegaron a la isla del Gallo se produce la famosa escena de los “Trece de la Fama”, en la que Pizarro se negó a volver a Panamá y exhortó a sus hombres a acompañarle a las “riquezas del Perú” o regresar a la “pobreza de Panamá”. Solo 13 de sus compañeros respondieron afirmativamente. Allí quedaron durante 7 meses a la espera del regreso de Bartolomé Ruiz en marzo de 1528 para continuar la expedición. Llegaron a Tumbes y pudieron comprobar la grandeza de ese lugar. Siguieron navegando más al sur y por fin decidieron regresar a Panamá a contar todo lo que habían descubierto y buscar recursos para una nueva expedición más poderosa. El regreso se inició el 3 de mayo de 1528.

Esta nueva expedición ya no sería una simple exploración, sería de conquista y poblamiento por ello necesitaban muchos más recursos y el apoyo de la corona por lo que Pizarro partió en 1529 a España a entrevistarse con el Rey obteniendo las capitulaciones de Toledo en las que él era nombrado adelantado y gobernador de Nueva Castilla, el nuevo reino al sur de Panamá, y Almagro obtuvo ser alcaide de la fortaleza de Tumbes, una hidalguía y 300.000 maravedíes anuales de renta. Obviamente esto enfadó a Almagro que ni fue a recibir a Pizarro cuando regresó de España pero al juntarse de nuevo éste para calmarle le cedió el título de adelantado y un repartimiento de indios que tenía en la isla de Taboga, en Panamá.

Tras 8 meses de preparativos el 20 de enero de 1531 Pizarro partió con dos navíos con 217 hombres, 180 soldados y 37 de a caballo. Almagro se quedó en Panamá para coordinar desde ahí la expedición con todo lo que fuera necesario. No fue hasta abril de 1533 en que Almagro y sus hombres se pusieron en marcha, mientras Pizarro ya había derrotado al imperio inca al capturar a Atahualpa en Cajamarca. Aquí se encontrarían de nuevo los dos socios y marcharon juntos a Jauja y luego a Cuzco, capital del imperio inca. Almagro fundó Trujillo y Santiago de Quito y marchó a Quito a encontrarse con Pedro de Alvarado que había llegado desde Guatemala con intención de quedarse con un trozo del pastel que se estaba repartiendo, pero Almagro negoció con él y logró que se marchara a cambio de comprarle gran parte de su ejército.

 

Chile

En 1534 Almagro envió a España una petición de que le concediesen una nueva gobernación, Nueva Toledo, que quedase al sur de la de Pizarro. Esta petición fue aceptada por el Rey y capituló a su favor. De esta manera Almagro se embarcaría en su gran objetivo de ser gobernador. Los rumores que había en el Perú sobre esas tierras eran muy positivos hablando de grandes riquezas y por ello a Almagro le fue muy fácil juntar hombres y numerosos indios auxiliares. Dichos rumores se ve que fueron impulsados por Manco Inca, que se encontraba en el Cuzco aliado con los españoles pero cuya verdadera intención era dividir a los españoles para debilitarlos antes de lanzarse contra ellos mandando a gran parte de ellos al sur con Almagro y así ejecutar la rebelión que tenía previsto llevar a cabo, algo que en verdad sucedió poco después sitiando la ciudad de Cuzco con los Pizarro dentro.

Partieron del Cuzco el 3 de julio de 1535 y tras una durísima travesía que pasó por el Alto Perú y atravesó los Andes teniendo que ascender montañas de más de 4000 metros de altura con su agresiva climatología que mató a casi el 70% de la expedición llegaron al valle del Copiapó en donde comenzaron a interactuar con los nativos con resultados muy diversos, con unos bien y con otros mal. Enviaron alguna expedición para explorar más al sur pero no encontraron oro ni riquezas más allá de las posibilidades agrícolas de la zona.

Visto lo visto Almagro, presionado por algunos de sus hombres, pensó en regresar al Cuzco a reclamarlo como dentro de su gobernación, pero no sabía que a la vez que le concedían el permiso de conquista un hermano de Pizarro, Juan, había logrado en España que el rey le ampliase el reino de Nueva Castilla 70 leguas más al sur lo que ponía muy en duda que el Cuzco entrase dentro de Nueva Toledo.

 

Cuzco

Finalmente decidieron regresar pero esta vez por la costa y por el desierto de Atacama, que si bien no fue tan dura como la ida cruzando la cordillera también lo pasaron muy mal por las temperaturas extremas y los problemas por la escasez de alimentos y agua. Cuando llegaron al Cuzco se encontraron con la rebelión de Manco Inca que mantenía la ciudad sitiada y defendida por los hermanos de Pizarro, Gonzalo, Hernando y Juan. Almagro primero intentó negociar con Manco Inca pero no logró que lo recibieses y posteriormente exigió a los Pizarro que entregasen la ciudad, a lo que se negaron. El 8 de abril de 1537 Almagro tomó el Cuzco por la fuerza e hizo prisioneros a los Pizarro. Al poco se enteró de la llegada de una fuerza pizarrista que iba al rescate de la ciudad pero Almagro los derrotó en la batalla de Abancay.

Pizarro se enteró de todo y envió varios emisarios para negociar con Almagro pero no lograron entenderse. A finales de 1537 Pizarro recibió una Real Cédula en la que se ordenaba a Almagro abandonar los lugares que Pizarro hubiese conquistado por lo que el Cuzco debía de ser entregado pero Almagro no se rindió y fue al encuentro de un ejército que Pizarro envió al Cuzco comandado por Hernando Pizarro, y el ejército almagrista capitaneado por Rodrigo Ordóñez se encontraron el 5 de abril de 1538 en el campo de las Salinas donde se produjo una dura batalla donde los pizarristas vencieron.

Diego de Almagro fue capturado y ejecutado en privado el 8 de julio de 1538 en la ciudad de Cuzco. A pesar del fin de su jefe los enfrentamientos entre pizarristas y almagristas continuaron en los años siguientes en una lucha fraticida por el poder en el Perú.

Importancia histórica

Diego de Almagro es un prototipo del aventurero rebelde y pendenciero. Toda su vida arriesgó y se embarcó en numerosas empresas yéndole unas bien y otras no tan bien. Fundó Trujillo en Perú, Santiago de Quito, San Gregorio de Portoviejo y Santiago de Guayaquil en el actual Ecuador. Llegó y vivió una época de grandes avances en la conquista de América participando activamente en Panamá, Perú, Quito y Chile, algo que no muchos conquistadores puede presumir.

Videos

A continuación varios videos relacionados con Diego de Almagro :

Gráficos

A continuación los gráficos relacionados con Diego de Almagro :

Retrato de Diego de Almagro
Retrato de Diego de Almagro
Retrato de Diego de Almagro
Retrato de Diego de Almagro
Descubrimiento de Chile por Diego de Almagro - obra de fray Pedro Subercaseaux
Descubrimiento de Chile por Diego de Almagro – obra de fray Pedro Subercaseaux
Expedición de Almagro a Chile, fray Pedro Subercaseaux.
Expedición de Almagro a Chile, fray Pedro Subercaseaux.

Obras

A continuación obras de o relacionadas con Diego de Almagro:

Rating: 6.7/10. From 27 votes.
Please wait...
Top